20 de marzo de 2020

DESDE LA DISTANCIA

Ayer fue el día del padre en España. Resulta raro tenerlo a escasos metros de distancia y no poder abrazarle ni besarle. Es un tío que físicamente aparenta dureza, pero en el fondo es un blandengue. Necesita constantemente el cariño de su familia y saber que estamos ahí.

Hoy se cumplirá mi séptimo día en casa y me apetece hablar de alguien, pero no de mi padre. Hoy se lo dedico a ella.

Esa mujer fuerte, inagotable, dura a más no poder. Esa que la edad y sus achaques no la doblegan. La perenne, la que nos ama a rabiar, pero a la que le cuesta dar un abrazo o pronunciar un te quiero.

Esa que nos ha protegido desde el momento en que llegamos al mundo mis hermanas y yo. Esa a la cada día más entiendo y más me parezco. Esa que durante estos días nos está expresando más emociones y cariño a través de un audio o videollamada que en el resto de nuestras vidas. 

Esa que cuando todo esto acabe recibirá todos los besos y abrazos que nos debe.

Esa mujer, mi madre.

Anuska.





17 de marzo de 2020

NOS QUEDAMOS EN CASA

Y nos quedamos en casa.
Porque no es una trinchera, no es una cárcel, es nuestra casa.
Esa que construimos para formar un hogar,
esa donde se encuentra nuestro lado bueno del sofá,
esa que almacena nuestros libros,
esa donde podemos disfrutar de la música a todo volumen,
esa que contiene el aroma a café de las mañanas,
esa que disfruta de nuestras mejores sonrisas,
esa que a veces se nos hace grande y otras pequeña.


Hoy como para muchos es mi cuarto día de estar en casa. Llevo pensando varios días que era necesario volver a escribir. De alguna manera me ha gustado siempre hacerlo, aunque la rutina diaria no me dejaba desde hace algún tiempo.

Y volveré hacerlo como siempre, apoyándome en mis libros y mi música. Esa que se hace de vital importancia en estos momentos. Os iré dejando entradas que nos ayuden a mitigar esos días en los que nos cueste seguir adelante. Por suerte esos días los superaremos ya que no estamos solos. 

Siempre hay alguien. 
Siempre estamos para alguien.

















Anuska.


6 de octubre de 2019

AMARILLO

Una caricia,
un abrazo,
un pensamiento.
Una llamada,
un aliento,
una entrega sin más.

Una mano,
una sonrisa,
un escudo,
un pilar,
un espejo donde mirar.

Un presente,
un futuro, 
una parte de mi,
un escalafón más.


Anuska.

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6 de enero de 2019

CONTADOR A CERO


Isaias 54:10 - Buscar con Google

Cuando tienes la certeza de que empiezas con el contador a cero.
Cuando ves el camino libre de obstáculos aunque los haya. 
Cuando aprendes que todo depende de la forma en la que vives y cómo lo vives.
Cuando comprendes que aquellos que se fueron lo hicieron por propia voluntad.
Cuando todo aquel que te rodea suma.
Cuando todo lo que sientes es sincero.
Cuando hablar abre caminos.
Cuando los silencios dicen más que el ruido.
Cuando una persona es hogar, familia. 
Cuando estás dispuesto a dejar que las cosas pasen.

Cuando todo esto pasa, solo queda agradecer que estés aquí, 
ahora.

Anuska

4 de noviembre de 2018

ABRIENDO VENTANAS


Te empeñas en buscar siempre en la dirección equivocada.

Cuando no hay necesidad de hablar o escribir es mejor no forzarlo. Mucho tiempo sin aparecer por aquí y creedme que en alguna ocasión lo he echado de menos y lo he intentado, pero las palabras no salían. Tal vez por esa falta de necesidad de hablar, de ser escuchada.

El silencio se está haciendo cada vez más presente en diferentes contextos de nuestras vidas. Aunque no es un silencio forzado o doloroso, se produce por necesidad de estar con uno mismo.

¿Que este mundo se está volviendo egoísta? Probablemente, pero esto tiene algunas connotaciones positivas como por ejemplo estar pendientes más de uno mismo y no de los demás.

Con esto no quiero decir que no debamos cuidar y alimentarnos de nuestras familias, amistades, pareja.
Son nuestras alas y sin ellas no seríamos nadie. Al menos yo.

Hay silencios necesarios y respetuosos. Necesitamos de él para poner las cosas en su lugar y darnos la oportunidad de seguir.

Cuando tienes una edad ese silencio puede hacerte sentir incómodo. Estamos acostumbrados a tanto ruido a nuestro alrededor que en cuanto nos sentimos solos huimos despavoridos de él y volvemos a ese ruido aunque nos resulte incómodo. 

Han pasado un par de años y ese silencio ha sido toda una herramienta de aprendizaje y conocimiento de mí misma. Poder saber quién eres, qué tienes, qué no quieres y lo realmente importante, a quién necesitas en tu vida, ha sido todo un descubrimiento. 

Jamás estuve callada, pero sí menos habladora. Tal vez perdí parte de mi espontaneidad, pero no mi esencia. Puede que eso sea lo que algunos llaman, madurez. Seguiremos dejando que las cosas pasen y nos hagan sentir vivos.

Estoy sentada en el suelo junto con las últimas cajas, el silencio me rodea y solo puedo escuchar desde dentro un GRACIAS. 

Se perdieron algunas personas en este camino, volvieron miradas del pasado y lo más importante, sigo llenándome de sonrisas y buenos momentos.

Un nueva ventana se abre y aparece un nuevo paisaje en el que sigues estando tú.

Anuska.


17 de marzo de 2018

UN LIBRO


Un libro que no te deje ileso,
un libro que sepa leerte,
que sea espejo y ventana,
paisaje, redención.

Un libro infinito.

Un libro que nos desate las muñecas,
que no pase de largo,
que apague la barbarie.

Un libro que nos destroce
y a la vez nos deje renovados,
como el hueso que el cirujano rompe
para ser reconstruido.

Un libro que nos ayude a afrontar la realidad,
que sepa como un mapa,
que nos explique qué senda debemos elegir.

Un libro que forme parte de la eternidad.

Un libro por el que merezca la pena morir,
un libro que te haga libre,
que te cuente tu vida,
por qué dolió,
un libro que ofrezca una respuesta.

Un libro que llegue a lo profundo.

Un libro cincuenta por ciento entrañas,
cincuenta por ciento experiencia,
un libro que abrigue a quien sufre y sepa dar luz
a la joven que precise una linterna
cuando su corazón se quede a oscuras.

Un libro que te mire y te seduzca,
que cuando metas los dedos entre sus piernas 
el orgasmo lo tengas tú.

Un libro que, sin ser la vida,
alcance a merecerla,
un libro que nos salve de los monstruos,
que parezca una casas en la que entrar,
un lugar donde quedarse.

Porque los libros no se quedan en nosotros,
somos nosotros quienes nos quedamos a vivir en ellos.

El libro que recoja los principios,
el libro que reúna los finales,
un libro que tenga puerta de entrada,
pero del que de ningún modo 
encuentres
la manera de salir.

Marwan.
#LosAmoresImparables 

Si quieres sentir todo eso, te invito a leer uno de sus libros.


18 de febrero de 2018

DE VIVA VOZ


"De viva voz, entonces,
no me atreví a decir que en ti veía
algo de mi futuro,
por miedo a una respuesta demasiado íntima.
Hoy -desde lejos-  ya puedo ser sincero
y egoísta,

añadiendo: goza por muchos años,
sé feliz todavía."

Jaime Gil de Biedma.

Foto vía GLAS-8