Madama Butterfly

  ¿Has tenido alguna vez la sensación de que un libro te grita sigilosamente desde su vitrina para que te lo lleves a casa? 

   Hay una frase por ahí que dice: "Me pregunto si, quizás sin darnos cuenta, vamos buscando los libros que necesitamos leer. O si los propios libros, que son seres inteligentes detectan a sus lectores y se hacen notar". Andrés Newman.

   Para alguien a la que le apasionan las mariposas pasar de largo al ver la portada de este libro sería imposible. Con ver solo la ilustración de la portada ya lo compras, no hace falta saber el precio, el título ni la historia que se relata en él. 

    Pero...¿si al ver el título no te resulta desconocido?...¿Madama Butterfly?, ¿De qué te suena? 

    Si en tiempos lejanos tuviste un profesor de música al que recuerdas por la cantidad de audiciones que te hacía estudiar en clase, lo más seguro es que al menos recuerdes que es algo de ¿ópera?, ¿Puccini?...si, algo de eso iba, pero no recuerdo la historia. 

   Pero algo te dice que te lo lleves, y cuando llegas a casa, lo abres y desde la primera página descubres que no has comprado un libro cualquiera, sino una verdadera obra de arte.

   Página tras página descubres la historia de amor, vamos a llamarla así, del Señor Pinkerton y Butterfly, acompañada de una serie de ilustraciones que no dejan indiferente.

   Si has visto alguna vez la película Memorias de una Geisha o Memorias de Harmony te sonará mucho la historia aunque en esta ocasión el amor de Butterfly no tiene el mismo destino que el de las anteriores. 

    Desde hoy tengo una joya en casa, de esas que solo brillan cuando decides pasar sus páginas.

    

   Os dejo algunas de las frases e ilustraciones que podéis encontrar en él...espero que os gusten tanto como a mí.

"Era un hada y me seducía más de lo que yo mismo quería reconocer, o quizá más de lo aceptable para mí"

"Cuando llegó a mi lado me sentí desarmado como un niño que da sus primeros pasos"

"La tormenta abate incluso al árbol más robusto"

"Creo que la elegí en ese precioso instante"

"Aquella mariposa que revoloteaba y se paseaba con gracilidad tenía que ser mía, aún a costa de quebrarle las alas"

 BENJAMIN LACOMBE

Anuska.